¿Qué es la trazabilidad?
La trazabilidad de un producto consiste en registrar todas las acciones, procesos y lugares por los que pasa dicho producto y que lo permiten identificar de forma única desde su lugar de origen hasta su destino final.
La trazabilidad nos permite conocer cuál ha sido su lugar de origen, el histórico de procesos o transformaciones que ha sufrido el producto, cuál ha sido su destino final y cuál ha sido su cadena de distribución entre los distintos lugares por los que ha podido transcurrir. La trazabilidad se ha convertido en un procedimiento imprescindible en muchos sectores de la industria por su importancia y de obligatorio cumplimiento en sectores como el agroalimentario, fitosanitario o el farmacéutico.
¿Por qué es importante la trazabilidad?
Los sistemas implantados de trazabilidad son herramientas clave a la hora de mantener la seguridad de los productos debido a que conoceremos todas las etapas por las que va pasando, de forma que si detectamos un problema en cualquiera de ellas podremos conocer el origen del problema y si la partida de producto ha llegado al destino final, tomar las medidas oportunas.
¿Qué beneficios tiene implantar un sistema de trazabilidad?
Debemos saber que implantar un sistema de trazabilidad no tiene por qué suponer un sobrecoste importante para nuestra empresa, pero sí que debemos hacer un estudio para implantar el sistema de trazabilidad correcto y así poder beneficiarnos de él ante cualquier problema. El tener un correcto sistema de trazabilidad de puede aportar los siguientes beneficios:
1. Mejorar la calidad de los procesos
El tener un sistema de trazabilidad implica una mejor documentación sobre los procesos y acciones por los que va pasando cada producto y por tanto facilita la detección, control y una rápida actuación en caso de encontrar problemas con un determinado producto o producirse una incidencia interna en procedimientos de trabajo.
2. Reducción de Costes
Al poseer más información sobre cada proceso por el que pasa nuestro producto, nos es posible detectar errores en nuestra metodología de trabajo con mucha mayor rapidez e incluso mejorar procesos internos lo que conllevará a una reducción de costes.
3. Ahorro de Tiempo
Cada vez que tenemos que recuperar información sobre un lote, a golpe clic, obtendremos de manera de precisa toda la información sobre ese lote, qué proveedor nos lo ha proporcionado, a qué clientes se lo hemos vendido o en qué producción lo hemos elaborado o consumido.
4. Garantía de Calidad
Dentro de sistema de trazabilidad, el etiquetado de los productos con su código de lote es de vital importancia tanto si es de cara nuestros proveedores como si es de cara al consumidor final y aumentará su confianza en nosotros al ver que todos nuestros productos están etiquetados. Además, para los sectores en los que la trazabilidad es de obligado cumplimiento, contribuirá a la certificación del producto.
5. Encontrar el origen del problema
Este punto tiene una especial importancia porque nos puede permitir demostrar nuestra inocencia ante la posible contaminación de un producto o delito contra la salud pública. Conociendo el lote causante del problema y aplicando la trazabilidad hacia atrás, obtendremos de una forma rápida toda la información asociada al lote hasta llegar al origen de las materias primas utilizadas y los proveedores que nos la proporcionan.
6. Identificar a qué cliente enviamos cada lote
De la misma forma que podemos encontramos el origen problema, al detectar un problema en alguno de nuestros productos, aplicando la trazabilidad hacia delante conoceremos cada lote a quién se ha distribuido y donde, de forma que ante cualquier problema, lo tendremos perfectamente acotado.
7. La información es poder
Sabemos que la información es poder y toda la información que nos aporte el sistema de trazabilidad la podremos utilizar para la toma de decisiones empresariales y mejora continua de nuestros procesos.
8. Mejora de comunicación
Para las empresas encargadas de procesamiento y transformación de producto, el sistema de trazabilidad ayudará a la coordinación y comunicación entre las diferentes secciones que intervienen en el proceso de producción.
Todos estos beneficios son razones más que suficientes para poner en marcha un sistema de trazabilidad. Las aplicaciones informáticas actuales nos ayudarán a implantarlo de forma que no altere nuestro ritmo de trabajo y hacer que su uso sea transparente.
¿Cómo implementar un sistema de trazabilidad para garantizar la calidad?
No todos los productos que distribuimos tienen la obligatoriedad de tener una trazabilidad.
1. Identifica aquellos productos que si la tienen y todos los parámetros que necesitamos identificar para cumplir con ella. P. ej. origen, variedad, tratamientos, etc. es la información que nos requerirán.
2. Selecciona el mejor método de identificación del producto (etiquetado).
3. Inventariar tus productos y asignar un lote.
4. Apóyate en la tecnología.
La implantación de un sistema de trazabilidad posibilita encontrar y seguir el rastro, a través de todas las etapas de la cadena de suministro, constituyendo un elemento de enorme utilidad para reducir los peligros y reaccionar rápidamente en caso de una alerta de riesgo en plantas y seguridad en productos hortofrutícolas.
Y, está especialmente designada para garantizar la calidad, ya que la trazabilidad permite conocer el origen, independientemente de su procedencia, cómo y dónde ha sido producido, con qué productos fitosanitarios ha sido tratado, quién lo ha envasado y transportado, o cómo ha sido conservado y comercializado.