La toma de decisiones es el proceso a través del cual elegimos entre las diferentes alternativas que se nos presentan para conseguir unos determinados objetivos. Desde que nos levantamos estamos tomando decisiones constantemente, algunas veces lo hacemos fácilmente y de forma inconsciente porque son decisiones que no afectan al desarrollo de nuestra vida. Sin embargo en otras ocasiones afectan directamente a nuestro negocio y tenemos que pensar mucho antes de decidir y ser consciente de la alternativa que escogemos pues nuestra elección afectara el camino del negocio.
Hemos de ser conscientes de que al tomar una decisión siempre tenemos que elegir entre varias alternativas y por consiguiente, esto implica, que por cada elección que tomemos, estaremos dejando a un lado otras alternativas. Por ello debemos intentar adelantarnos y ver las consecuencias de la elección para escoger la mejor opción para nuestro negocio.
El proceso de la toma de decisiones cuenta con tres pilares básicos:
- El plan: donde marcaremos el objetivo y las acciones para llevarlo a cabo.
- La ejecución: de la acción que nos acercara al plan.
- El control: medición y corrección de manera tal que se puedan lograr el plan.
Dentro del proceso de toma de decisiones, podemos encontrar determinados aspectos que dificulten dicho proceso: hacer las cosas sin pensar, entrar en conflicto entre lo que debo hacer y lo que me conviene, la ignorancia, las costumbres y hábitos, falta de tiempo, los estados de ánimo (contento, deprimido, enojado, etc.), las presiones, el estrés, la intuición…
Algunos consejos a tener en cuenta antes de tomar una decisión:
- PACIENCIA: Siempre que sea posible tomate tiempo para reflexionar. Si se hacen las cosas sin pensar algo puede salir mal y pueden haber consecuencias que no podamos asumir.
- TEN EN CUENTA TUS EMOCIONES: Es importante no decidir nada cuando estamos alterados, los sentimientos afectan en nuestras decisiones y en muchos casos a nuestro negocio. Mira a tu alrededor y pregúntate que es lo que tu negocio necesita en realidad.
- LAS COMPARACIONES SON ODIOSAS: a veces nos ayudamos de informaciones erróneas para tomar una decisión, sin darnos cuenta de las circunstancias no son las mismas. Hemos de ser objetivos en este aspecto.
- REDUCE EN LO POSIBLE LAS ALTERNATIVAS: No es más fácil decir entre 5 que entre 50 alternativas, pero si limitamos las opciones nos acercaremos más a la alternativa que más nos interesa.
- SIN MIEDO: Cada persona toma las decisiones con un estilo diferente y lo cierto es que todos podemos equivocarnos, pero también sabemos que aprendemos de nosotros y de los demás. Siempre es mejor tomar una decisión errónea que no tomar ninguna.
- SEGURIDAD: Una vez tomada la decisión hay que trasmitirla y defenderla. Convéncete de que eres capaz de hacerlo.
En un momento como el actual, muchas veces no tendremos tiempo para reflexionar, comparar, reducir alternativas y ser fieles a un estilo. Pero tranquilo esto es cuestión de entrenamiento y citando a Alexander Pope “Errar es humano, perdonar es divino, rectificar es de sabios”.
imagen: Leah Jones