«Parálisis por análisis» ¿has oído alguna vez esta frase?, quizás no, pero seguro que esta situación te resulta familiar: Preparar un plan y empezar a darle vueltas y vueltas, mejorarlo, analizarlo y volver a mejorarlo, así hasta el infinito y nunca ver el momento de llevarlo a cabo. Entramos en una dinámica de replanificar y ampliar un plan, que son tantas las decisiones y análisis que realizar, que nos bloqueamos y no hacemos nada.
¿Por qué nos ocurre esto? Porque siempre puedes tener más información y algo siempre puede mejorar. Nos pasa en todo tipo de situaciones, tanto en casa como en el trabajo, analizar todo y tener todo controlado, que hasta cierto punto tiene sentido, pero lo pierde cuando nos quedamos bloqueados.
Darle vueltas a qué cocinar el domingo, a cambiar la decoración de mi casa, a implantar un nuevo programa en la empresa, a preparar una campaña de marketing, la parálisis por análisis llega sin darte cuenta.
Creer que solo tengo un «cartucho»
Tenemos miedo a equivocarnos y muchas veces pensamos que no vamos a tener otra oportunidad. Tomar una decisión supone descartar otras alternativas y no queremos equivocarnos, por eso le damos más vueltas y al final lo que creemos que es nuestra última oportunidad se convierte en una oportunidad perdida, porque pasado tanto tiempo, de nada sirve un plan si no se lleva a cabo en su debido momento. ¿No os pasa muchas veces que agotas los plazos y te quedas sin tiempo de reacción?
¿Cuanta información necesitamos analizar?
El exceso de información nos lleva al «día de la marmota», a analizar sin medida y sin fin. Son tantas las variables y frentes que abrimos que no nos podemos enfocar y entramos en caminos que nos distraen, que son irrelevantes y nuestros esfuerzos agotan nuestra energía, se pierde la capacidad de llevar a cabo aquello que tenemos que hacer.
Tenemos que comparar el coste-beneficio de no hacer nada o de hacerlo aunque podamos equivocarnos ¿vale la pena?, no, una planificación excesiva no garantiza ningún resultado.
¿Cómo evitamos caer en la parálisis por análisis?
Es cosa nuestra no caer en esto, a todos nos cuesta tomar decisiones, porque no deja de ser enfrentarse a miedos y problemas, así que elegimos ser cobardes y nos quedamos en ese análisis que creemos que está bien, pero realmente nos paraliza. Por tanto:
- No busques la perfección, no existe
- Utiliza también tu intuición y lánzate, pero ¡tampoco saltes a lo loco!
- Conoce cuáles son tus limitaciones, es posible que necesites pedir ayuda u opinión a un compañero
- No te pases pidiendo ayuda y opiniones, muchas veces complican las cosas
Hay que tener claro que una decisión siempre va a tener un riesgo, siempre, y esa incertidumbre hay que asumirla. No podemos estar esperando siempre, así que define los objetivos y las tareas de cada uno de forma clara y sencilla, establece fechas límite, no dejes que la parálisis por análisis llegue y consigue sacar adelante tus planes de una vez por todas.